De memoria

Ucrania en el corazón…

Carlos Ferreyra

Tema sin posible controversia, la opinión pública, los medios y el gobierno más ignorante del orbe ya emitieron la condena contra el Diablo moscovita, el hombre de mirada acerada, karateca y ex espía de la Union Soviética.
Estamos bajo la sombrilla de Estados Unidos y la única información válida es la que ellos proclaman. Las falsedades y recuérdese que la primera víctima en una guerra es la verdad, comienzan a inundar redes y redacciones, sin posibilidades de constatación.
Por cierto, amigo lector, ¿sabe dónde queda Ucrania, qué idioma hablan y las fuentes de su cultura? Todo, sin duda, ruso. En las gráficas diseminadas por las redes, se ven, lógico, campamentos de refugiados y grupos humanos en franca huida. Llama la atención de que los edificios civiles se ven incólumes, intactos.
Los puritanos, quienes jamás pecaron atrás de una máquina de escribir, piden con cierta justeza pero totalmente fuera de la realidad, que no se propalen informaciones sin constatar. No reclaman, por ejemplo, la versión de que tres mil soldados rusos fueron muertos en una rápida acción del Ejército ucraniano.
Afirman que las zonas bajo fuego son civiles pero citan el caso de un edificio de 32 pisos víctima, se sabe después, de un mortero ucraniano fallido. Se difunde una casi poética declaración de un niño uniformado que carga una monstruosa arma y que se sumó a la resistencia. Lo damos por bueno igual que las declaraciones de un trio de modelos de pasarela, con coquetos cascos de combate.
Nadie hace caso ni le preocupa el fondo del asunto, resumido en breves palabras en el rechazo de Estados Unidos y los gobiernos obsecuentes de la OTAN y la UE para que antiguos territorios rusos se sumen a esos organismos controlados por Washington.
Tomemos algunos datos al azar:
1) Fuerzas ucranianas de tintes neonazis, asesinan a la población de ascendencia rusa en el Donbass desde 2014; el mundo occidental, la ONU y los medios tradicionales callan.
2) Rusia pide garantías jurídicas para cesar esa masacre; cero respuestas.
3) La OTAN, EEUU y la UE financian a Ucrania, y la ONU callada.
4) Rusia pide que Ucrania se comprometa con el respeto a los acuerdos de Minsk, y que deje de agredir a los rusos de Donbass; Ucrania lo ignora y Francia y Alemania guardan silencio.
5) Rusia pide que la OTAN no se extienda hacia sus fronteras, y que no adhieran a Ucrania ni a Georgia. Europa responde que están en todo su derecho de hacer lo que les venga en gana. No responden a las garantías jurídicas que Rusia acordó con EEUU a inicios de los 90.
6) EEUU, envía más de 300 toneladas de armas largas a Ucrania y miles de millones de dólares a las fuerzas armadas ucranianas, amenaza constantemente a Rusia con sanciones.
7) En 2020 y 2021, se aprobó en la ONU una resolución que condena el Nazismo, el neonazismo y el fascismo en todas sus formas. EEUU y Ucrania votaron en contra. Casi toda Europa se abstuvo. La ONU guardó silencio.
En conclusión, cerraron todas las opciones diplomáticas a Rusia, ignoraron todas sus peticiones jurídicas y se olvidaron de los civiles rusoparlantes del Donbass. Ahora que Putin toma las riendas del asunto con hechos consumados, se escandalizan.
Los datos aquí anotados, son producto de un estudio académico avalado por el Conacyt, en el que coincide parcialmente el académico neoyorquino y ex titular de Relaciones Exteriores de México, Jorge G. Castañeda.
Un dato final, recordando que EE UU tiene rodeado a Rusia con bases militares principalmente en Georgie y Ucrania y que ¡os rusos atacan posiciones militares ucranianas no a civiles ni ciudades. En cambio Ucrania asedia con apoyo desde 2014 los territorios independentistas con un saldo de 14 mil muertos…
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