Opinión

Sin libertad de derecho

A diario hay personas que son víctimas de la discriminación, los motivos para que se les excluya o restrinja pueden ser su sexo, edad, religión, ideas políticas, alguna discapacidad y/o enfermedad, preferencia sexual, estado civil, embarazo, condición social o económica, forma de vestir o de expresión

María Ortiz

 

La Ley Federal para Prevenir y Erradicar la Discriminación, busca para las personas la igualdad real de oportunidades quitando las barreras de obstaculización de las libertades y derechos, dando prioridad a mujeres y grupos vulnerables.


 

Hablaremos de la discriminación laboral, que, aunque ha ido reduciendo, aún está presente en el día a día de los trabajadores de cualquier institución o empresa y que con su existencia afecta la convivencia y bienestar, no solo laboral sino también social, restando confianza a la empresa en donde se lleva a cabo, ya sea como empleador o negocio.

 


Cuando un colaborador es perjudicado en su salario, horarios, crecimiento profesional, es menospreciado o excluido por compañeros o jefes dentro de una empresa o institución, por razones que no van ligadas a su desempeño laboral como su género, una enfermedad, incidencia en incapacidades, cultura o alguna discapacidad física ocurre discriminación laboral.

 

La discriminación a la mujer en el trabajo es una de las que más se presentan, situaciones como la diferencia de salario, aunque nuestra ley de trabajo diga IGUAL SALARIO POR TRABAJO DE IGUAL VALOR, el bajo número de mujeres en puestos directivos o que tienen un ascenso, la discriminación se genera entre compañeros desde comentarios sarcásticos o bromas de mal gusto sobre las capacidades de un género y otro, hay centros de trabajo donde si una mujer está embarazada es motivo de despido o no la contratan.

 

La edad otro motivo de discriminación laboral, esta ocurre en los más jóvenes que sufren abusos en sus salarios o en jornadas laborales más largas, maltratos por su falta de experiencia o miedo de sus jefes o compañeros más antigüedad a que les quiten el puesto, por otro lado, están los colaboradores más veteranos que son catalogados como anticuados o sin las habilidades necesarias para manejar la tecnología y desafíos actuales, siendo esto también un motivo para no ser contratados en alguna empresa, unos por jóvenes sin experiencia laboral y otros por su edad avanzada.

 

La religión, ya no es tan común como hace años, pero en algunas empresas o bien las personas responsables de la contratación descartan a candidatos por su creencia religiosa o suelen prohibir ciertas costumbres del culto que profesan. La orientación sexual es un gran factor de discriminación en centros de trabajo, esta situación ha mejorado, pero aún prevalecen prejuicios contra los homosexuales y transexuales siendo francos de burlas, comentarios ofensivos o no son tomados en cuenta para un ascenso profesional. Rescindir el contrato de trabajo de alguien por contraer o tener una enfermedad o destinar a personas con alguna discapacidad física a puestos menores por creer que son menos aptos para desempeñar puestos con mayor responsabilidad.

 

El pertenecer a un sindicato también es motivo de discriminación laboral, desde el hecho de la distinción que se hace al nombra y separar a trabajadores de confianza y los sindicalizados, el pertenecer a alguna organización sindical es un gran factor para que los trabajadores sean víctimas de hostigamiento laboral, no recibir las mismas prestaciones que el resto de sus compañeros, son despedidos sin justificación alguna, existen empresas que si fuiste parte de un sindicato no te contratan, a pesar que la Libertad Sindical se encuentra plasmada en los artículos primero y 123 de nuestra constitución y  que los sindicatos desempeñan una función primordial al garantizar el respeto por el derecho al trabajo en los planos local y nacional y ayudar al estado a cumplir sus obligaciones.

 

La discriminación laboral sea el motivo que sea, trae consigo que los trabajadores que la sufren tengan un nivel de estrés más elevado, estén propensos a tener una crisis nerviosa, insatisfacción personal o depresión, disminuye su productividad, afectando no solo a las personas involucradas, sino también a la empresa en sus resultados y en el ambiente laboral, también afecta a la familia porque el sentimiento de frustración puede generar una reacción en cadena de emociones y acciones negativas que afectan en la salud y calidad de vida de las personas.

 

En México solo 4 de 10 trabajadores expresan que en su empresa hay una cultura de diversidad laboral, que las oportunidades son iguales para todos sin importar la apariencia física, género, edad o discapacidad. Es importante crear una convivencia laboral que permita hacernos sentir que nuestro centro de trabajo es una bendición y no una tortura o desgracia al cual vamos por la necesidad económica o responsabilidad que tenemos con la empresa, el lograr un ambiente laboral con un trato justo e igualitario es la clave para que instituciones y empresas alcancen sus objetivos.

 

La igualdad es el alma de la libertad; de hecho, no hay libertad sin ella”Frances Wright

 

 

 

 

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