“Son aptos, solo es cuestión de permitirles demostrarlo y apoyarlos con fe, sin compasión”

Más que el acondicionamiento del mobiliario en el espacio gráfico, la accesibilidad es un derecho que garantiza a las personas con discapacidad la oportunidad de tener una vida independiente y con participación en la vida social

María Ortiz

 

El libre acceso al entorno físico, al transporte y a la información sea un problema urgente de atender ante la evidencia de lugares poco accesibles, la vulnerabilidad que mujeres y hombres con discapacidad visual experimentan en sus recorridos diarios, ante esta desventaja las personas con discapacidad visual desarrollan estrategias para hacer menos inseguros sus desplazamientos y apropiarse física y simbólicamente de los espacios.

 

Las personas que no pueden ver sufren en la búsqueda de su realización personal desde la niñez en sus primeros años en la escuela porque tienen que batallar con un sistema educativo excluyente, afectando completamente su calidad de vida y arriesgando sus derechos a la educación y el derecho al trabajo; la falta de herramientas tecnológicas, de apoyo por parte del gobierno, pero más que nada esa indiferencia humana.

 

Los dueños de las empresas o los empleadores tienen dudas en ¿si funcionará o no, será productivo contratar a invidentes o tendrán que cuidarlos todo el tiempo? ¿tendrán que adaptar todas las instalaciones para ellos?

 

Casi 2,200 millones de personas en todo el mundo, tienen una discapacidad visual ligera, severa o grave, de las cuales alrededor de 1,000 millones su discapacidad visual pudo haberse prevenido o aún no se ha tratado y México se ubica entre los 20 países con mayor número de personas afectadas por la discapacidad visual o ceguera.

 

La OMS informa que el ochenta por ciento de los casos son evitables o restaurables, es imprescindible darle la importancia que tiene nuestra vista y la atención médica adecuada a tiempo porque de no hacerlo esto traerá graves consecuencias que limitará nuestra vida.

Es lamentable que por desidia perdamos algo tan valioso como es el privilegio de ver, hay quienes son ciegos de nacimiento, por causa de algún accidente o enfermedad, ellos no tuvieron la opción de cuidarse, sin embargo, no se detuvieron, han buscado una forma distinta de vivir.

 

La ceguera no es un impedimento para el trabajo, el deporte y con alegría podemos decir que en México vamos avanzando para que se respete e impulse el trabajo de estas personas, la incorporación en empresas de gente con discapacidad da una imagen de sensibilización ante la sociedad, además de que tienen beneficios fiscales y contributivos.

 

La tecnología permite superar barreras para que miles de personas sean empleadas en diferentes puestos como: telefonistas, administrativos, fisioterapeutas, abogados, profesores, informáticos, economistas, psicólogos, redactores, diseñadores, etc. Hay que reconocer el esfuerzo que han hecho las deportistas que clasificaron al Mundial de Ciegos Lizeth Aguilar y Blanca Lucía Jonapá, al Ingeniero Carlos Arriola quien después de perder la vista a causa de la diabetes, crea un software que ayuda a la enseñanza para todos los niveles educativos.

 

Andrea Bocelli el cantante de Ópera, pop y otros géneros musicales, fue perdiendo la vista debido al glaucoma, quedando ciego a los 12 años.

 

Jorge Luis Borges, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX o simplemente los comerciantes invidentes de la Ciudad de México que luchan para que las autoridades permitan que continúen trabajando con sus puestos ambulantes, ejemplos hay muchos y puede haber más si como sociedad apoyamos a que los espacios y oportunidades sean para todos.

Hay instituciones y programas con el objetivo de rehabilitar y ayudar a esas personas que viven en las sombras, ojalá haya más libros, textos y menús en los restaurantes  traducidos al lenguaje braile como los creados por el Centro de Estudio para invidentes y el IPN, actualmente, existen dispositivos sensoriales en forma de bastón y lentes para transitar en las calles y poder detectar obstáculos, los hay con una bocina que emite un sonido de alerta para todos los que estén a cinco metros, generando empatía y comprensión entre el usuario y las demás personas.

 

Existen teléfonos que poseen el sistema de lectura braille integrado en cada una de sus teclas.

 

De este modo, una persona con discapacidad visual puede ejecutar funciones como escribir mensajes, marcar números, contestar llamadas, algunos modelos de teléfonos tienen un botón especial para llamar a los servicios de emergencia, bastante útil para cuando se presenta cualquier tipo de situación crítica.

 

Alianza Éntrale AC es una iniciativa del Consejo Mexicano de Negocios, ellos son el vínculo para la contratación y desarrollo laboral de personas con discapacidad, cuidan que las empresas que integran la Alianza mantengan el índice de inclusión laboral de más de un 15% y a su vez haya un avance en su organización de sus trabajadores con discapacidad.

 

El Banco de México puso en circulación billetes de 100, 200 y 500 pesos con marcas perceptibles al tacto distintivas para cada denominación, con el propósito de facilitar su identificación a las personas invidentes.

 

Los ciegos en México conforman un sector de la sociedad que ha sido estigmatizado históricamente. En términos generales, este panorama los sitúa como individuos poco productivos derivado de un imaginario en el que son concebidos en un permanente estado de dependencia.

 

Si bien muchos mitos han logrado derrumbarse gracias al empuje de organizaciones de la sociedad civil, programas gubernamentales de inclusión y políticas públicas de sensibilización en torno a la discapacidad, en realidad, continúan siendo discriminados para acceder a nichos de trabajo bien remunerados o estables.

 

Es necesario que todos los miembros de la sociedad participemos en actividades para darles herramientas diseñadas para los invidentes y así les sea más sencillo desenvolverse en las actividades diarias que realiza cada ser humano y puedan generar un equilibrio real en su vida, que el talento va más allá de la condición de la persona y la discapacidad visual es solo una característica más en la gran diversidad humana.

 

 

 

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