Luis Escobar Ramos
Lo que implica la búsqueda de soluciones que lleven a lograr la preservación y ampliación de los beneficios de seguridad social para aquellos que la tienen y la inclusión de los trabajadores que participan en esas nuevas formas de trabajo en los esquemas de seguridad social de los diferentes países.
Tomando en consideración, desde luego, la necesidad de establecer una estrategia que contemple la organización de los trabajadores, su concientización y unidad para enfrentar esos nuevos retos, la organización sindical (sindicatos) como herramienta de defensa y lucha de sus intereses en el nuevo ámbito digital.
Dentro de ello, como elemento básico, incluir la perspectiva de que las nuevas generaciones piensan y actúan de forma distinta, en muy buena medida debido a la era tecnológica en la que nacieron y han vivido, por lo que la forma de implementar la acción sindical y organizativa debe ser acorde a estas circunstancias.
Hasta hace algunos años los trabajadores teníamos una visión sobre el empleo muy definida, misma que fue trastocada con la irrupción del modelo neoliberal desde los años ochenta, que vino socavando paulatinamente dicha figura del trabajo que era conocida como “EMPLEO DE POR VIDA”, que se caracteriza por ser permanente, asalariado, de tiempo completo, con subordinación en la relación de trabajo con un patrón o empleador visible y definido, con derechos laborales claros y con seguridad social, lo que brindaba certeza y certidumbre al trabajador, su familia y a las propias empresas
No obstante, actualmente las cosas han cambiado y lo anterior ha sido sustituido por formas, que como ya mencioné se conocen como atípicas, que han traído consigo la informalidad, el subempleo y el empleo en plataformas digitales; que son precarizados, deterioran el nivel de vida y causan una afectación profunda en el estado de bienestar de las sociedades.
Existen factores que han jugado un papel fundamental para que esta tendencia del empleo haya tomado fuerza y son: la globalización, la disrupción de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), el surgimiento de la economía colaborativa (repartidores de productos y servicios que se solicitan en línea) y la digitalización, robotización e inteligencia artificial, que están llevando a los trabajadores a un terreno peligroso que amenaza su presente y futuro inmediato.
Derivado de lo anterior, se debe implementar una gran estrategia transversal, entendido esto, como un trabajo en el que deberán ser partícipes, el individuo, organizaciones de la sociedad civil, organizaciones sindicales, los poderes legislativos y los gobiernos para implementar las siguientes acciones:
- En cuanto al fenómeno de la INFORMALIDAD, que no es un tema obra de la casualidad, sino producto de una necesidad de autoemplearse para enfrentar un entorno laboral deprimido y que no provee oportunidades de acceso a un empleo formal bien remunerado, es necesaria la realización de un análisis y diagnóstico de las causas y motivos que la han provocado, para poder establecer política pública a través de planes y programas sobre el particular; de igual forma deberán articularse leyes en los ámbitos laboral, social y fiscal, entre otros, que deberán contener aspectos de flexibilidad entre las partes involucradas, pero también mayor control, supervisión y fiscalización de las autoridades respectivas.
- En lo respecta a otra modalidad de empleo atípico, como es el SUBEMPLEO y el TRABAJO POR CUENTA PROPIA, que es consecuencia, en el primer caso, de la necesidad de los trabajadores de complementar su ingreso, ante los salarios precarios que perciben en un primer trabajo y en la segunda situación, producto de la imperante necesidad de obtener un ingreso que permita solventar las penurias individuales y de sus familias, es básico el establecimiento de política pública en la materia pero que no sea de carácter asistencialista, sino con tintes de desarrollo económico y social, para lo cual y de ser necesario se debe pensar en la renta básica universal, como una medida de tipo transitorio con alcances de transición hacia la movilidad social de los trabajadores y que fomente el acceso a la seguridad social.
- En el terreno de la irrupción de las TIC, la Cuarta Revolución Industrial, las nuevas formas de trabajo y la aparición de la economía colaborativa, entre otras, debemos tener claro que al enfrentarnos a un entorno digital laboral novedoso, requerimos de trabajar en la planeación y diseño de innovadores esquemas de protección social que contemplen e inserten a estos nuevos trabajadores en los esquemas de seguridad social públicos o privados, evitando con ello una BRECHA DE SEGURIDAD SOCIAL y entrando en un terreno de SEGURIDAD SOCIAL DIGITAL, ya que la evolución del empleo no debe ser motivo de disminución o pérdida de derechos fundamentales.
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