Opinión

Nicotina: El mejor aliado para dejar de fumar

LA NICOTINA NO es la culpable de la muerte al año de 65,000 personas en México y cerca de 8’000,000 en el mundo, se trata de la COMBUSTIÓN la que genera lo anterior, es decir EL CIGARRILLO ENCENDIDO

Les platicaré algo, en el tiempo en que fumaba, pensé que iba a morir sin poderlo dejar y me había resignado a ello, utilizaba frases como “de algo me tengo que morir”, “mi tía de 95 años fuma y ahí está”, “iré bajando poco a poco”, “ahora si lo lograré” “cuando quiera lo dejo”, “disfruto mucho el cigarro, por eso no lo dejo” y muchas más.

 


Recuerdo mi primer intento cuando nació mi hija, prometí no volver a tocar uno solo, ya consumía 2 cajetillas en ese tiempo, solo duró 15 días el intento y en una reunión volví al cigarro y creo que comencé a fumar mucho más, después intenté con los chicles, pero pasó lo mismo, incluso fumaba con el chicle en la boca, el parche solo me lo puse una vez, pues me daba mucho escozor y no lo soporté mucho, llegamos al Champix y fue cuando comprendí que moriría fumando, o al menos así lo creía hasta entonces, sentía sueños de terror, busque ayuda del psicólogo, lo deje 2 meses con mucho esfuerzo, pero al morir mi padre volví al tabaco esta vez más fuerte que nunca, 3 cajetillas al día y desde ese día hasta que lo dejé, nunca bajé un solo cigarro.

 

En 2017, por motivos de salud, viajé a la Ciudad de México para atenderme, tenía un dolor en el costado derecho y ya no podía subir escaleras, he de comentarles, pensé que tenía cáncer, batallaba mucho para realizar mi trabajo de Fotógrafo y se me salía el corazón cada vez que realizaba alguna sesión, caminaba o subía escaleras.


 

El médico me mando realizarme estudios generales de todo, placa del tórax, ultrasonido y pruebas de sangre y orina, esperé ansioso 3 días para llevar todos los resultados y que los evaluara, tantas cosas pasaron por mi cabeza, cualquiera que fume se los puede decir, siempre pensamos que estamos enfermos y que vamos a morir, siempre lo queremos dejar y nos ponemos fechas, pero no lo hacemos.

 

Mi pregunta es… ¿sirvieron alzas de precio?, ¿sirvieron los pictogramas en las cajetillas? ¿las ratas muertas?, ¿el cáncer de garganta? ¿familiares muertos por el tabaco?

 

La respuesta es: NO.

Pero ese día, lo que me dijo el médico iba a cambiarlo todo…

Había fumado, 37 años, los últimos 20, tres cajetillas al día, 625,000 cigarros en mi vida, ¿suena mucho, ¿verdad?, si convertimos los precios al día de hoy, había gastado cerca de $ 2’187,000.00 y eso sin sumar lo de mi esposa.

 

De nuevo me ganaron las palabras, pero en la próxima entrega la conclusión donde platicaré lo que el médico me dijo y cómo salí corriendo de su consultorio, espero no se lo pierdan.

 

Antonio Toscano Florenzano / Activista Antitabaco

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