María Ortíz
En nuestro país existen varias plazas exclusivas para adquirir productos relacionados con la cultura japonesa.
El manga, el anime, el cosplay, los videojuegos, han traspasado las fronteras para entrar en la vida de miles de mexicanos, que demandan más y más opciones para disfrutar masivamente de nuevas creaciones orientales…. Poco a poco los jóvenes van adoptando costumbres, idioma, sus reglas y estilos de vida de la cultura japonesa.
El 20 de agosto de 1964 en México se trasmitió el primer anime; Astroboy, abriéndole la puerta a títulos como Candy Candy, que fascinó a miles de chicas por sus historias de amor y desesperación, así fueron llegando otros como Los Caballeros del Zodiaco, Caritele, cabe aclarar que mientras que en Japón estas animaciones eran dirigidas para mujeres y jóvenes, en nuestro país la audiencia eran niños, de esta forma, las generaciones de 1980 y 1990 crecieron bajo la influencia de programas como Los Súper Campeones,Dragon Ball, Pokémon, Digimon, Sailor Moon entre muchos otros, que no tienen censura en temas de adultos dentro de atmósferas como tristeza, tragedia y muerte, aunque también otros como heroísmo, esperanza, altruismo, magia, humor, acción y aventuras, todo esto combinado en una historia, creando así, revistas, videojuegos, ropa, música, álbumes de calcomanías, juguetes y juegos de mesa que acompañan a cada serie.
La falta de conocimiento hizo que millones de personas confundieran el ANIME con las caricaturas que acostumbraban ver, esto ocasionó que varias series se transmitieran en horarios infantiles y familiares, pero al percatarse del contenido, organizaciones religiosas y padres de familia atacaron con críticas muy fuertes para que fueran censuradas o retiradas de la programación.
Así que las compañías encargadas de la distribución de dichos programas tuvieron que hacer cambios estéticos para no provocar que las masas protestaran, y los fans pudieran continuar disfrutando de esas historias y también porque los animes shonen o shojo (animes para jóvenes) fueron creados para ser muy populares y su misión es vender todo tipo de artículos relacionados a su serie.
Las censuras o cambios que les hicieron, como quitar la sangre en los peleadores, cambiar los cigarrillos por paletas, el busto enorme de las chicas por uno que apenas se nota, son estrategias para que sea más fácil la distribución, además estos cambios solo aplican para el género shone y la televisión abierta, no para los demás géneros ya que se distribuyen en aplicaciones específicas que compras o descargas de manera digital.
Razón por la que, el anime ha perdido espacio dentro de la televisión abierta, sin embargo, lo ha ganado en otras plataformas.
El anime influye en el mundo interior y mental de todas las personas, al despertar emociones fuertes, ya sean positivas o negativas. En lo positivo es el desarrollo de la creatividad, crece el interés en la música, el dibujo, aprender muchas cualidades morales útiles como alcanzar tus metas, cuidar a tu familia y a los demás, respeto por sus ancestros y la tierra de donde vienen, hasta defender su honor.
El impacto negativo ocurre cuando hay escenas de agresión, violencia, relaciones sexuales, y que, para niños y adolescentes puede ser traumático, manifestándose como irritabilidad, agresión o depresión, sobre todo si la persona vive en estado psicológico difícil.
El machismo y la violencia de género, ya que, la cultura japonesa ha impuesto que solo la mujer delgada, de buen cuerpo y cara bonita, es digna de admiración y respeto, despreciando y sexualizando una vez más la imagen femenina.
La razón por la que el anime sostiene su popularidad en todo el mundo, es porque ha ido creciendo con sus espectadores y la nostalgia que provoca en ellos al ir descubriendo algo nuevo y disfrutan con intensidad cada capítulo de esas historias con finales poco predecibles.
Así mismo, esta popularidad ha permitido a los creadores del género, innovar con figuras decorativas, videojuegos, ropa, looks, videos picantes que puedes encontrar en diversas páginas web y redes sociales.
Es importante señalar que el gusto por las películas o series anime entre adultos ha incrementado por su atractivo artístico y sobre todo por la historia y personajes que les llevan acompañando desde su niñez y que son ellos los que han creado en sus hijos el gusto por dichas series, poniendo como ejemplo a personajes como GOKU, VEGETA, LOS GUERREROS Z, NARUTO, que, con constancia, fuerza de voluntad, disciplina y conocimiento, se han superado internamente y han alcanzado sus metas.
